En esta imagen se puede observar la estructura que siguen los instrumentos de cuerda frotada (violín, viola, cello y contrabajo). En ella se pueden ver las partes exteriores, la piel del instrumento, y la partes interiores . Esas partes interiores son las encargadas de transmitir las vibraciones a través de la caja de resonancia. El sonido se produce al tocar una cuerda. Ésta comienza a vibrar y esas vibraciones se transportan mediante el puente al interior del instrumento. Ahí, en el interior, se encuentra el alma. El alma comienza a vibrar poniendo en contacto las dos tapas de la caja de resonancia. Esas vibraciones salen ya al exterior mediante las efes produciéndose así el sonido del instrumento.
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